Antes del verano, la N-232 en mejores condiciones desde Vinaròs hasta Morella

MIGUEL AGOST (FOTOS J.ORTI-J.FIBLA)

Conducir por peligrosas curvas, estrechas calzadas o perder un valioso tiempo detrás de una caravana de camiones y coches para viajar hasta Morella pronto será historia.

Días atrás ratificaron un paso invisible en hechos, al ser un mero trámite burocrático, pero que es un avance fundamental para culminar lo que hace años era un sueño y cada día está más cerca de ser una realidad, una N-232 en condiciones desde Vinaròs hasta la capital de Els Ports. Y este mismo año prevén iniciar las obras para hacerlo posible, empalmando con el final de las que están en marcha en el puerto de Querol.

Al respecto de estas últimas, encaran su última fase. El espectacular viaducto de la Bota va cogiendo forma y estará listo a principios de mayo. Con esta previsión, fuentes de la constructora prevén que las actuaciones para acabar con las curvas del puerto culminen antes del verano. Los trabajos en el viaducto de la Bota avanzan según los plazos marcados y acabarán en mayo.

Respecto al tramo pendiente, el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicó la declaración de impacto ambiental favorable del proyecto de mejora de la carretera nacional, en el tramo masía la Torreta-Morella sur. Un anuncio que llega tras meses recabando informes y marca un punto de inflexión para ejecutar esta reforma. El alcalde, Rhamsés Ripollés, destacó que «este paso clave es una gran noticia que constata el apoyo del Gobierno a este proyecto, que pronto, supondrá la mejora integral de toda la nacional -232 en este término». Asimismo, remarcó que «conseguir este impacto ambiental favorable ha sido un trabajo laborioso y de constante comunicación con el Ministerio, así como otras administraciones, como las conselleries pertinentes». La mejora de trazado y reordenación de accesos será entre los puntos kilométricos 54.900 y 60.210 de la N-232 actual, con una longitud de actuación en tronco principal de 4,85 kilómetros.

Características Técnicas

La actual carretera N-232, por la que circulan cerca de 3.000 vehículos por día con un 16% de vehículos pesados, en el tramo en estudio comprendido entre la masía de La Torreta y Morella sur, se caracteriza por tener un trazado sinuoso tanto en planta como en alzado, dado que discurre por una orografía ondulada, modelada por la presencia de cauces naturales como es el caso del río Bergantes. Igualmente, dispone, salvo en su zona final, de una sección transversal estricta que no supera los 6 metros de anchura. Esta situación provoca mermas de visibilidad y funcionalidad y, por ende, un menoscabo de la seguridad vial, agravado todo ello por una multitud de accesos presentes en el tramo. De esta forma, se ha diseñado un nuevo trazado para una velocidad de proyecto de 80 km/h con una sección de calzada convencional con dos carriles de 3,50 m y arcenes de 1,50 m, buscando a su vez la necesaria reordenación de accesos y dotándola de la accesibilidad requerida, tratando de aprovechar al máximo la traza existente para minimizar la afección al entorno.

Se han proyectado, adicionalmente, un total de 6,845 km de caminos de servicio para dar acceso a las propiedades colindantes. Igualmente, se han contemplado a lo largo de la traza accesos al tronco mediante carriles de cambio de velocidad en su zona inicial y central y una glorieta partida en su extremo final, lo que unido a los tres pasos inferiores proyectados facilitará la accesibilidad y el intercambio de movimientos entre los caminos de servicio situados a ambos márgenes de la carretera.

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Fotos: Avança el viaducte del «pont de la Bota», a la N-232