Primeros terneros nacidos tras inseminar a 14 vacas de la Todolella con semen de un toro de Japón

JAVIER ORTÍ
Éxito del proyecto de inseminación artificial asistida a novillas de Els Ports con semen de Kove Wagyu de Japón tras el nacimiento de los primeros terneros. El alumbramiento de los primeros animales ha constatado el logro en la apuesta de tres jóvenes ganaderos de la Todolella.

La primera fase del proyecto se inició en junio del año pasado, cuando fecundaron 14 novillas de raza Bruna de los Pirineos y Limusinas con semen procedente de un semental japonés de raza Wagyu. Ahora, han nacido 7 terneros, de forma que el 50% de las vacas lograron ser fecundadas. «Son unos números óptimos en este tipo de procesos, estamos muy contentos con los primeros resultados», explica el veterinario que lidera el proyecto, Honorio Carceller.

CURIOSOS NOMBRES

Algunos de los animales recién nacidos ya tienen nombre. El joven ganadero de la localidad, Victor Milián, ha puesto a sus tres ejemplares Wagyu nombres relacionados con la cerveza. «Este año pongo a todos los terneros nombres de marcas que bebo. Son Cruzcampo, Josefino y Steinburg», detalla. «Buscamos mejorar la carne de vacuno y aumentar la fertilidad de las reses de la zona», asegura Carceller. Los tres ganaderos han decidido mantener su apuesta con la iniciativa, que tendrá continuidad. «Era muy importante continuar inseminando novillas para obtener mejores resultados a largo plazo», remarca. Una línea estratégica que es compartida por Víctor Milián. «Este año volveremos a inseminar otras novillas también con semen de Wagyu. Los resultados llegarán definitivamente si en 2 o 3 años tenemos esta carne en los restaurantes de la comarca», señala. Honorio Carceller y Víctor Milián, junto a las vacas y los terneros recién nacidos.

RETOS PENDIENTES

Tras el éxito de las primeras fecundaciones con inseminación asistida, quedan ahora retos pendientes. «Si el día de mañana logramos acreditar el sello de carne de Wagyu-Els Ports será la mejor forma de refrendar el éxito de la propuesta», apunta. Una de las máximas de la acción, que ha contado con el aval de la Diputación, es mejorar la economía de esta zona. «Si aumentamos la fertilidad de las vacas y a la larga vendemos aquí la carne de terneros Wagyu, los beneficios quedarán en el territorio», manifiesta Carceller. El reto en un futuro es que los restaurantes de Els Ports puedan vender carne Wagyu para que los beneficios se queden en el territorio.

Tal y como informó el diario Mediterráneo, en junio del 2021, el proceso de fecundación artificial se basa en que la tecnología y la genética juegan un papel muy importante. Para lograr la fecundación a través de este sistema, el semen se almacena en cánulas, que se conservan a -194 grados. Seguidamente, extraen las dosis y esperan hasta que los tubos alcancen una temperatura de 38°, momento en el que finalizan su hibernación. «Por cada dosis de 0,2 mililitros hay unos 20 millones de espermatozoides de los que esperamos que unos 10 millones sobrevivan a todo el procedimiento y uno llegue a fecundar a la novilla», indica Carceller. Este plan provincial sigue los pasos dados por reconocidos veterinarios a nivel mundial.

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