

Los “nanos i gegants” de Vinaròs estrenan “casa propia”
LA NOSTRA GENTVINARÒSVINARÒS MAIL 6 setembre, 2020 Vinaròs News

EMILI FONOLLOSA
El amplio “elenco” de “nanos i gegants” de Vinaròs va a poder por fin contar con “casa propia” donde puedan ser visitados de forma permanente por vecinos y visitantes. El Ayuntamiento ha decidido que un patrimonio cultural tan arraigado no debía permanecer por más tiempo en el almacén municipal y solo ser admirado cuando participa en actos festivos.
Así pues, la reciente restauración de la Capilla de Santa Victoria va a permitir dar una “morada digna” para los 6 “gegants”, los 2 “gegantos” y las familias de “nanos”. El alcalde Guillem Alsina ha indicado que esto no es incompatible con que la capilla pueda acoger periódicamente alguna exposición o acto cultural, “en esos determinados momentos, serán depositados en el Auditori Municipal para, acabados estos actos, volver a la capilla”. Alsina ha recordado que ciudades vecinas como Tortosa o Morella los tienen expuestos permanentemente.
Los fines de semana la capilla S.Victoria abrirá sus puertas para que se puedan visitar los “nanos i gegants” de Vinaròs y está previsto crear vídeos explicativos sobre su historia. Recordaba el alcalde que algunos de los “nanos i gegants” de Vinaròs representan personajes históricos y de gran arraigo en esta ciudad. Cabe recordar que el mercado municipal ha sido en ocasiones lugar de exposición temporal de algunos de los “nanos i gegants”. Precisamente ayer martes por la tarde, se inauguró en el Auditori una exposición dedicada a una de las parejas de gigantes, el tio Gori i la tia Caballera, con motivo del 20 aniversario de su construcción. La exposición estará abierta hasta el 18 de septiembre en horario de tarde.
El jefe de la colla, Jordi Beltrán, destacó que «en esta muestra se puede apreciar el recorrido fotográfico por estas más de dos décadas de existencia de estos gigantes». Por su parte, el constructor de las figuras, Agustí Roso, mostró que estaba «emocionado» por ello y que la idea de convertir en gigantes estos personajes vinarocenses fue del edil de la época, Juan Boix. «Fue un gran honor que me pidieran construirlos, porque los conocí personalmente, ya que el Tío Gori y la Tía Caballera vivían en mi calle y tuve relación con ellos», afirmó Roso.