La Guardia Civil interviene más de 450 ejemplares de cangrejo azul vivos en l’Ampolla

Efectivos del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil de Tarragona, durante la pasada noche sorprendieron a cinco personas que se encontraban capturando ilegalmente ejemplares de cangrejo azul, en la zona conocida como El Goleró, del término municipal de l’Ampolla.

Con motivo de las diferentes quejas de los profesionales dedicados a la pesca del cangrejo azul en la zona del Delta de l’Ebre, se establecieron diferentes operativos dedicados a detectar las capturas ilegales de ese producto, ya que actualmente son muy pocos los profesionales del sector que disponen de autorización para su captura.

Así, durante la pasada noche en la zona conocida como El Goleró, del término municipal de l’Ampolla, los agentes sorprendieron a cinco personas de nacionalidad china pescando cangrejo azul sin la correspondiente licencia administrativa.

Tras ser identificados y solicitarles la correspondiente autorización para ejercer la actividad, manifestaron no tenerla, siendo denunciados por incumplir la Ley 2/2010 de pesca y acción marítima.

El cangrejo azul

Es originario de las costas atlánticas americanas, se alimenta de moluscos, crustáceos, peces pequeños y materia vegetal, sus patas tiene un característico color azulado, siendo una especie de gran tamaño, cuyos ejemplares adultos pueden llegar a medir 20 centímetros. y pesar en 500 gramos y 1 kilo. Está considerada una de las 100 especies invasoras más perjudiciales del Mediterráneo.

Desde 2016 se otorgan licencias para la pesca profesional, existiendo hasta la fecha un reducido número de ellas.

La Guardia Civil advierte que, aunque este crustáceo sea una especie invasora, su captura incontrolada fuera de los cauces legales, impide conocer el destino que se le da al producto, causando un peligro para la proliferación incontrolada de esta especie, suponiendo un grave riesgo tanto para el medio ambiente como para la salud  alimentaria.

La totalidad de los cangrejos intervenidos al encontrarse en condiciones higiénico sanitarias óptimas fueron entregados al centro benéfico de Cáritas en la localidad de l’Aldea, contribuyendo así a colaborar con los colectivos mas necesitados y con las personas más vulnerables.