La falta de civismo con los residuos obliga a tomar nuevas medidas e imponer sanciones

EMILI FONOLLOSA

El Ayuntamiento de Vinaròs se ve obligado a multiplicar labores de limpieza, imponer sanciones, idear constantemente nuevas ideas y programar campañas informativas ante la falta de civismo que demuestran algunos ciudadanos a la hora de deshacerse de sus residuos.

Este verano, cuando la ciudad ha multiplicado sus residentes eventuales por la presencia turística, la situación no ha mejorado, antes al contrario, ha empeorado sobre todo en las dos zonas turísticas (sur y norte). Desde las concejalías de Servicios y Agricultura están pensando en tomar más medidas para intentar al menos paliar esta situación. Junto a contenedores para residuos orgánicos, plásticos o vidrios son lanzados residuos de jardinería y se dejan incluso colchones, muebles… sin hacer uso del ecoparque., como comentaban desde este departamento municipal, añadiendo que los hay que ni se molestan en levantar la tapa de algún contendor para depositar dentro los residuos. La Concejalía de Agricultura y Medio Ambiente controla constantemente los puntos de recogida instalados en el campo y costas norte y sur, con 32 puntos en total para recoger restos vegetales. Los días para dejar estos restos son sábado y domingo y el lunes y martes se pasa a recogerlos pero a las pocas horas ya están sucios. “Habitualmente encontramos sofás, televisores, de todo, esto incrementa el coste económico de la recogida y se pierde mucho tiempo” decía el edil Jordi Moliner. “En los puntos de recogida del campo -añadía-, se depositan restos de derribos, muebles… lo cargan en una furgoneta y se los llevan a lanzarlos a algún barranco o en un descampado, no entendemos cómo no se hace uso del ecoparque que está abierto de lunes a domingo y donde se puede dejar gratuitamente cualquier resto”.

Desde la citada concejalía, se programan periódicamente campaña de concienciación ciudadana pero no parecen ser efectivas entre algunos que siguen usando inadecuadamente los puntos de recogida de residuos. También se cuenta con un ecomóvil y un servicio de recogida de enseres. La concejalía de agricultura en coordinación con el agente rural multiplica su labor y ya se han visto en la necesidad de imponer algunas sanciones, “aunque no es fácil dar con el infractor porque el término municipal es muy grande y actúa en horas en las que vigilancia baja”.

Una de las decisiones que se van a adoptar próximamente es dificultar el acceso a la caseta de los animales, destinada a que los granjeros depositen sus animales muertos, porque “nos encontramos muchas veces con restos de obras, ante una muestra más de incivismo con lo fácil que es acudir al ecoparque”. Asimismo, está planificado instalar mayor número de cámaras de vigilancia, de las que ya hay en marcha en distintos puntos del término municipal, “estas cámaras son de gran ayuda para poder localizar, identificar y sancionar el infractor” destacaba Moliner.

Esta falta de civismo, por otra parte, daña la imagen que ofrece la ciudad ante los turistas, ante el acumulo de basura en algunas zonas y dando la sensación de que el servicio se recogida de residuos no actúa con frecuencia, como también se lamenta desde el consistorio.