El Ayuntamiento de Vinaròs amplia los huertos urbanos ante la elevada demanda

EMILI FONOLLOSA

El Ayuntamiento de Vinaròs, mediante la concejalía de Agricultura y Medio Ambiente, ha decidido emprender una nueva campaña de creación de huertos urbanos solidarios, la quinta ya, ante la incesante demanda de la ciudadanía interesada en tener un espacio donde desarrollar sus habilidades con la agricultura.

 La quinta fase de los huertos se habilitará junto a los ya existentes entre las avenidas Juan XXIII y Gil de Atrocillo. Días atrás, comenzó el derribo de unos antiguos corrales situados en los terrenos donde se hará la ampliación y que están junto al instituto de Secundaria Leopoldo Querol. El desmontaje y derribo de estos corrales ha sido realizado por una empresa especializada, debido a la existencia de fibrocemento, como informaba el edil del área Jordi Moliner. También se han recolocado los instrumentos del cuadro de mandos del pozo que alimenta a los huertos. “Hay tanta demanda de parcelas para huertos que todas ellas las tenemos prácticamente ocupadas, cuando se produce una baja, ya hay en seguida alguien a quien se le adjudica pues la lista de espera es larga” apuntaba Moliner. Esta quinta fase, de la que se hará campaña informativa, ampliará los huertos con 25-30 nuevas parcelas.

La entrada a los nuevos huertos será independiente de la actual, pues estará junto a la parada de autobuses de Gil de Atrocillo, “queremos hacer diferentes grupos o comunidades de huertos para mejorar el control”. La entrada principal además se ha cambiado, se ha colocado una puerta reforzada y se hará entrega a cada adjudicatario de una novedosa llave anticopia. Tiempo atrás, la zona de huertos urbanos entre Juan XXIII y Gil de Atrocillo ya fue ampliada por el Ayuntamiento para crear un espacio dedicado a vivero de árboles y habilitar más terreno para la cuarta fase de los huertos que se ponen a disposición de vecinos y colectivos. En esa ocasión se crearon 30 nuevas parcelas y en el momento de ponerlas en servicio, 18 de ellas ya estaban adjudicadas. Moliner indicaba que “cuando ya hicimos el reglamento nuevo y la transformación de estos terrenos ya dejamos un espacio de cara a ampliaciones en un futuro”.

En estos momentos, en dicha zona hay un total aproximado de 170 huertos, con lo que cuando se incorporen los nuevos, rondarán los dos centenares. Cuando se hace la entrega del huerto a cada vecino adjudicatario, éste es atendido por la Concejalía de Agricultura y el agente de la unidad rural medioambiental. Además, en cada ampliación se hacen reuniones por sectores, para informar a los interesados acerca de algunos temas relacionados con las condiciones de uso, horarios y normas de convivencia, especificadas en el nuevo reglamento.

Cada parcela se entrega limpia y labrada y se cede a cada interesado durante tres años y uno más prorrogable. El Ayuntamiento, además, cuenta en esa misma zona con un vivero forestal donde recepcionar los árboles donados por la ciudadanía e irlos colocando en las zonas de la población donde se considere más oportuno. Había olivos donados por sentencia judicial de la partida Soterranyes ya recolocados, además de mandarineros, celementinos, moreras, palmeras, etc.