Dos años de ‘El Club de la Vida’ de Vinaròs y ya con más de 400 participantes

X.F.-E.F.

Faltaba un aliciente para el día a día de la gente mayor en Vinaròs y esta iniciativa lo ha demostrado sobradamente. El Club de la Vida cumple este mes de enero dos años. Y lo hace superando todas las expectativas iniciales. Ya son más de 400 personas -el 70% mujeres- las que disfrutan de esta propuesta, que se presentó a principios de 2017 con el objetivo de ampliar la oferta de actividades que tenían las personas mayores de 55 años.

 La acogida fue espectacular, y en los primeros seis meses ya se habían asociado más de 200 usuarios. El motivo de este éxito hay que buscarlo en el enfoque que ha realizado esta propuesta, que no tan solo ofrece actividades en las que este colectivo disfrute, sino que también promueve la participación activa de ellos respondiendo a sus deseos y capacidades, pone en valor su trabajo y sabiduría y fortalece los vínculos sociales.

 Un envejecimiento activo por el que ha apostado el Ayuntamiento de Vinaròs, que desde la concejalía de Política Social que dirige Mamen Ruiz, decidió doblar en 2018 el presupuesto para ampliar la oferta de actividades y el horario.

Patricia Velázquez es la coordinadora del Club de la Vida. Argentina de origen y con estudios y experiencia laboral en Trabajo Social, la vida le llevó hasta Vinaròs, donde desde hace dos años sigue cultivando su vocación de ayudar a personas en esta iniciativa. Enamorada de nuestra ciudad y su gente, de su labor en el Club destaca su capacidad para disfrutar trabajando con los usuarios, de los que valora su experiencia vital, sus potencialidades y capacidades y también de acompañarlos en la aventura de seguir descubriendo todo lo que queda por vivir, aprender y disfrutar. Asegura que desde sus inicios, esta iniciativa ha cambiado bastante.

“El primer año fue una propuesta de animación sociocultural, y las actividades fueron propuestas desde la coordinación con el objetivo de ir conociendo a las personas y una vez percibidas y valoradas las necesidades y potencialidades de los participantes, este año se comenzó a trabajar la programación de las actividades los días asignados desde las asambleas de socios donde se eligen las actividades a realizar dentro de las áreas de trabajo: área cognitiva, área psicomotriz y área relación y participación social. Se busca ir generando un programa mucho más orientado a la mejora de la calidad de vida a medida que las personas que envejecen, con políticas de «envejecimiento activo», potenciando las capacidades de la persona para llevar una vida productiva en la sociedad y mantener su autonomía e independencia el mayor tiempo posible”, explica.

La propuesta ha superado todas las expectativas, según Patricia. Un éxito que “radica en poner en valor la potencialidad de la persona mayor y el brindar un espacio sano de relaciones sociales y de continuar aprendiendo a vivir con decisión propia”.

Los usuarios del Club de la Vida están muy satisfechos de formar parte activa de esta propuesta.

Algunos señalan que se apuntaron inicialmente “para mejorar y participar en grupo”, otros destacan que fue “para conocer a otras personas y distraernos, compartiendo impresiones, y activar la mente”, mientras algunos destacan que lo hicieron “para salir de casa y hacer amistades” o “para tener un motivo para salir y relacionarte” o “por el compañerismo que hay desde el primer día”.

Además, aseguran que su día a día ha cambiado por el simple hecho de acudir al Club. “A mi me ha cambiado en muchas cosas; por ejemplo en desarrollar la memoria y participar haciendo ejercicio físico o mediante el baile”, señala una usuaria. Otros destacan que “nos hace sentir bien” o que “hemos conocido a más gente, nos distraemos y despejamos la mente, hacemos ejercicio y nos gustan mucho los viajes y el baile en línea”.

En cuanto a lo que más valoran de la iniciativa, destacan “el tener la ilusión por encontrarme con las amigas”, “las amistades que encuentras”, “el compañerismo”, “todo en general” o “el trato humano de la coordinadora Patricia Velázquez con todos nosotros”. Respecto a si aportarían alguna novedad para el próximo año, algunos usuarios lo dejarían “todo igual”, otros prefieren “ampliar días y horas”, y otros proponen cambios horarios y actividades nuevas como pintura de mandalas o taichí terapéutico al considerarlo “muy importante para la salud de las personas mayores”.