Compromís pide que el estado invierta 21 millones en la antigua N-340 de Vinaròs antes de su reversión

X.F.-E.F.

El senador de Compromís, Jordi Navarrete, informó que van a presentar una moción en el Senado y el pleno del Ayuntamiento de Vinaròs para solicitar la inversión de 21 millones de euros en la adecuación de la N-340a a su paso por la capital del Baix Maestrat antes de que pase a ser municipal.

Navarrete argumentó esta solicitud está basada el cumplimiento de la normativa vigente, ya que existe la orden 3426 de 27 de octubre de 2006 del Ministerio de Fomento que no está derogada y que indica que deben abonarse o invertir 204.644 euros más el IPC desde el año 2005 por cada kilómetro de carretera antes de su reversión. “A preguntas al Ministerio sobre cómo estaba en Vinaròs esta reversión, al ser ya efectiva en Benicarló y Peñíscola, se nos informó que a pesar de que esta normativa no está derogada, no se aplicaba desde 2011 porque el estado contestaba siempre a los ayuntamientos que por motivos de la crisis económica y la falta de presupuesto no se podía realizar esta inversión. Pero teniendo en cuenta que tanto el gobierno de Rajoy como el del Pedro Sánchez aseguran que ya hemos salido de la crisis, creemos que es el momento de pedirlo”, concluyó. En esta moción también se pide la interconexión entre la nueva y la antigua N-340 al considerar que existen deficiencias.

Exámenes teóricos de conducir

Otra moción que presentará Compromís tanto al pleno de Vinaròs como al Senado es la que solicita que la Dirección General de Tráfico (DGT) incluya a Vinaròs en el listado de localidades que podrán realizar exámenes teóricos de conducción, tal como se hacía antes de 2013. También se pide a la DGT que informe a la mayor brevedad posible de las condiciones necesarias para que la ciudad pueda recuperar estas pruebas. Esta petición se realiza, según explicó el senador de Compromís, porque la DGT ha afirmado que está realizando un listado de las poblaciones que podrían tener un examen de desplazados de teórica y estaba valorando ya las condiciones mínimas requeridas.

Navarrete explicó que ya en 2013 el diputado Joan Baldoví preguntó los motivos por los que se habían eliminado la posibilidad de realizar los exámenes teóricos en Vinaròs. “La respuesta literal de la DGT a Baldoví fue que las pruebas se realizaban en papel por la carencia de condiciones idóneas, que había una falta de garantía de objetividad, que había 65 sillas pegadas unas a otras sin pasillos para acceder ni los alumnos ni el personal que vigilaba, que costaba verificar que no se copiaba y la identificación de cada uno de los examinantes, por lo que resultaban ser unas condiciones indignas y de falta de seguridad. Además, la DGT añadió que muchos alumnos se desplazaban a Vinaròs al considerar que el examen era más sencillo de hacer o copiar”, indicó.